No podría dejar de escribir unas palabras por este medio para festejar la partida de este funesto gobierno. Por fin nos libramos del circo de las mentiras, de las manipulaciones, del patronaje a mansalva. La excelencia prometida no fue tal, sino solo un carnaval de chambonadas frenado por la decencia de las movilizaciones estudiantiles o sociales. Pretendió un país mejor (al menos eso publicitaba), pero las dificultades superaron sus estériles recursos, no quedándole sino la vergonzoza manipulación de las cifras para aparentar en la estadística lo que la realidad negaba. Por 4 años no supo su gobierno de la palabra humildad ni menos escuchar. Por el contrario, la soberbia thatcheriana fue su estandarte, donde gran parte de sus autoridades escondían tras su soberbia y tozudez su enorme ignorancia de lo que significaba la administración del Estado.
Por lo anterior, celebro el fin de fiesta, celebro el desmantelamiento de este circo nefasto para los chilenos. Su gobierno no fue sino un mal chiste largo que por fin llega a su término. Piñera, vuela alto con tu séquito de torpes bufones.
martes, 11 de marzo de 2014
miércoles, 13 de octubre de 2010
EL CIRCO SHOW DE LO MINEROS
Con toda seguridad a esta temprana hora, y mientras esribo estas líneas, millones de compatriotas deberán estar asistiendo al mayor encuentro del morbo jamás concebido, gentilmente auspiciado por la televisión y en interesanda colaboración con el gobierno.
La bacanal del bicentenario pareciera haber encontrado una extensión en un hecho en sí desgraciado, funesto y vergonzoso, que a cualquier humano hubiera llamado a la mínima reflexión, pero que en en este caso, se ha transformado en un mega circo show, un reality de la más miserable, absurda y morbosa factura, pero exitoso en audiencia, por cierto, y en seguro negocio para las autoridades por los jugosos dividendos que a tan temprana hora cosecha esta empresa del rescate, justificado esto por un torpe mercado donde abunda la ignorancia y escasean las neuronas.
Al ver al presidente a las afueras de la mina gritando "viva Chile", se me vino a la memoria las frecuentes salidas de madre de ese payaso que llegó a la presidencia de Ecuador: Jamil Mawad. Hasta el más mínimo hecho lo convertía en fiesta.
Ver a mi país en actitud bananera no hace más que demostrar que estamos a años luz del desarrollo intelectual, lo que justifica que nos gobierne este tornasolado grupo de políticos.
A propósito, ¿qué estarán maquinando a nuestras espaldas mientras presenciamos este circo romano?
Esta fiesta del rescate me transporta al momento en que el protagonista de "El Perfume" iba a ser colgado en la plaza pública. Todo el mundo se hizo del mejor lugar para presenciar la horca del asesino de doncellas. Se arrendaron a precios exorbitantes los balcones de privilegiada vista que darían presencia vip al momento de la muerte. Los vendedores de comida y menjunjes varios no daban abasto para atender a tanto comensal venido hasta de los lugares más remotos. Hasta se mandaron a hacer souvenirs para recordar este hecho histórico. Etc.
Nuestro país esta poseído desde hace meses y lo seguirá estando por mucho más, por una sola gota de la magnífica creación de Grenouille, el más grande perfumista de la historia. Quiero ser benevolente y no afirmar que nos hemos engullido todo el frasco.
Hoy no importan las condiciones materiales en que operan los trabajadores de mi patria. Da lo mismo. De ese tema no se habla, no es relevante. No tiene objeto señalar que gracias a las escasas o nulas regulaciones, precarias en sí mismas, muchos compatriotas se ganan la vida en inhumanas y miserables condiciones, las mismas que llevaron a estos mineros a quedarse atrapados.
Ellos serán rescatados del encierro, cierto. Se contrataron para los efectos maravillosos artilugios. No se midió en gastos ni en recursos para traerlos de vuelta a sus familias. Perfecto.
¿Y quién nos rescatará nosotros? ¿Quién nos salvará de los sueldos miserables que nos atrapan día a día en nuestro reality-país sin fin? ¿Alguien esbozará siquiera ideas para poner fin a la problemática indígena? ¿Se contratarán artilugios para poner fin al estado terminal de la educación y la salud?
El padre Hurtado y Clotario Blest se deben estar revolcando en su tumba.
La bacanal del bicentenario pareciera haber encontrado una extensión en un hecho en sí desgraciado, funesto y vergonzoso, que a cualquier humano hubiera llamado a la mínima reflexión, pero que en en este caso, se ha transformado en un mega circo show, un reality de la más miserable, absurda y morbosa factura, pero exitoso en audiencia, por cierto, y en seguro negocio para las autoridades por los jugosos dividendos que a tan temprana hora cosecha esta empresa del rescate, justificado esto por un torpe mercado donde abunda la ignorancia y escasean las neuronas.
Al ver al presidente a las afueras de la mina gritando "viva Chile", se me vino a la memoria las frecuentes salidas de madre de ese payaso que llegó a la presidencia de Ecuador: Jamil Mawad. Hasta el más mínimo hecho lo convertía en fiesta.
Ver a mi país en actitud bananera no hace más que demostrar que estamos a años luz del desarrollo intelectual, lo que justifica que nos gobierne este tornasolado grupo de políticos.
A propósito, ¿qué estarán maquinando a nuestras espaldas mientras presenciamos este circo romano?
Esta fiesta del rescate me transporta al momento en que el protagonista de "El Perfume" iba a ser colgado en la plaza pública. Todo el mundo se hizo del mejor lugar para presenciar la horca del asesino de doncellas. Se arrendaron a precios exorbitantes los balcones de privilegiada vista que darían presencia vip al momento de la muerte. Los vendedores de comida y menjunjes varios no daban abasto para atender a tanto comensal venido hasta de los lugares más remotos. Hasta se mandaron a hacer souvenirs para recordar este hecho histórico. Etc.
Nuestro país esta poseído desde hace meses y lo seguirá estando por mucho más, por una sola gota de la magnífica creación de Grenouille, el más grande perfumista de la historia. Quiero ser benevolente y no afirmar que nos hemos engullido todo el frasco.
Hoy no importan las condiciones materiales en que operan los trabajadores de mi patria. Da lo mismo. De ese tema no se habla, no es relevante. No tiene objeto señalar que gracias a las escasas o nulas regulaciones, precarias en sí mismas, muchos compatriotas se ganan la vida en inhumanas y miserables condiciones, las mismas que llevaron a estos mineros a quedarse atrapados.
Ellos serán rescatados del encierro, cierto. Se contrataron para los efectos maravillosos artilugios. No se midió en gastos ni en recursos para traerlos de vuelta a sus familias. Perfecto.
¿Y quién nos rescatará nosotros? ¿Quién nos salvará de los sueldos miserables que nos atrapan día a día en nuestro reality-país sin fin? ¿Alguien esbozará siquiera ideas para poner fin a la problemática indígena? ¿Se contratarán artilugios para poner fin al estado terminal de la educación y la salud?
El padre Hurtado y Clotario Blest se deben estar revolcando en su tumba.
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